Tigre: tren, lujo y aullidos

María Martínez

Tigre (Argentina), 5 de marzo de 2023

Tigre es una ciudad a escasos kilómetros de Buenos Aires. La descubro en google mirando opciones de actividades de fin de semana. Imagino una especie de Venecia argentina, nada que ver, pero es una opción para un domingo asfixiante. Nos acercamos en el MITRE, un tren de cercanías de la provincia. El recorrido es corto, entre 30 y 40 minutos. El tren va lleno, pero no es agobiante. Tigre es conocido por sus paseos en barco por el delta y sus múltiples ríos. Hay excursiones turísticas, pero también una lancha colectiva utilizada por la gente que reside en las islas que forman los diferentes ríos. Queremos ser auténticos, como no, y optamos por usar esa lancha colectiva en lugar de la opción turística. Decimos un destino al azar; en realidad nos da igual a que sitio ir, sólo queremos montar en la lanchita. El viaje es agradable porque la brisa compensa las altas temperaturas. Las islitas están repletas de casas, cuanto más te alejas de la ciudad, más lujosas. Después del paseo con parada para comer y un desvío por un parque infantil con helado incluido, volvemos hacia la estación del MITRE. Nos montamos en el tren y pasa un vendedor ambulante. Recuerdo que Carolina me dijo que tenía una colega antropóloga que trabajaba sobre los vendedores ambulantes en los trenes y quizás sería una entrada para ver no sé qué situación de investigación (nota: escribir a Carolina!). Pienso haber desaprovechado el paso por las estaciones del MITRE y no haber tenido el ojo atento a situaciones ViDes. Un sonido provoca que levante la vista justo en ese instante. Un señor (?) me dice algo. No entiendo y de nuevo (ver cata sobre el ecoparque) no es un problema de versión de español; literalmente es a lo sumo un sonido lo que emite, quizás un aullido. De nuevo reacciono diciéndole que no tengo nada suelto aunque nada asegure que esa interacción tiene sentido. Él sigue su camino. Le sigo con la mirada. Va parando ante varios viajeros, de manera que yo considero aleatoria y no exhaustiva, creo que no consigue nada. Se apoya en la puerta del vagón, el tren arranca, me centró ya en otras cosas. Gracias serendipia!